Canon Bíblico
Canon Bíblico
Canon Bíblico
Introducción:
Según la RAE un canon es considerado como un conjunto de normas, preceptos o asimismo principios en los cuales se rige la conducta humana, un movimiento artístico, una determinada actividad, entre otras cosas. En otras palabras, canon: significa medida usada como instrumento para aferir determinadas cantidades, por ende, se volvió un padrón de aquello que es considerado correcto.
En este breve resumen del curso "Panorama del Nuevo Testamento" comenzaremos por la clase 1, donde estudiaremos a profundidad qué es un canon bíblico, cuántos podemos encontrar, cómo se formaron y además, en cual rige nuestra fe.
El "canon" de la Biblia, podemos definirlo como los libros aceptados oficialmente como las Sagradas Escrituras.
Desarrollo
Para comenzar, es necesario definir el concepto de "revelación divina", este concepto está dividido en tres partes; la primera de ella es La revelación de Dios en la naturaleza. Es la misma Revelación que Dios hizo de sí mismo en la naturaleza (Salmos 19:1) "Los cielos proclaman la Gloria de Dios, el firmamento anuncia la obra de sus manos." Con esto podemos decir que todas las cosas creadas hablan de un creador, de un Dios, de una inteligencia superior, sobrehumana, creativa, autónoma, que de la nada hizo todo lo que existe.
Si el hombre observa la naturaleza, debe tener en sí mismo la capacidad de saber que en ella hay algo divino. Dios se revela, no permanece escondido y lo hace a través de la naturaleza.
Para encerrar esta primera parte, me gustaría compartir el Salmo 8:
1¡Oh Jehová, Señor nuestro,
Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra!
Has puesto tu gloria sobre los cielos;
2 De la boca de los niños y de los que maman, fundaste la fortaleza,
A causa de tus enemigos,
Para hacer callar al enemigo y al vengativo.
3 Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos,
La luna y las estrellas que tú formaste,
4 Digo: ¿Qué es el hombre, para que tengas de él memoria,
Y el hijo del hombre, para que lo visites?
5 Le has hecho poco menor que los ángeles,
Y lo coronaste de gloria y de honra.
6 Le hiciste señorear sobre las obras de tus manos;
Todo lo pusiste debajo de sus pies:
7 Ovejas y bueyes, todo ello,
Y asimismo las bestias del campo,
8 Las aves de los cielos y los peces del mar;
Todo cuanto pasa por los senderos del mar.
9 ¡Oh Jehová, Señor nuestro,
Cuán grande es tu nombre en toda la tierra!.
La segunda parte de esta Revelación divina es la Revelación en la consciencia (imago dei), esto nos quiere decir que cuando Dios creó al hombre, lo hizo a su imagen y semejanza (Gn. 1:27) eso hizo con que el hombre tuviera grabada en su corazón la ley de Dios. Paulo hace referencia a esto en Romanos 2, donde se refiere a los gentiles que practican de manera natural cosas que son ciertas y erróneas y que las hacen por cuenta de la ley de Dios que está grabada en sus corazones.
En tercer lugar hablaremos de la Revelación especial, esta revelación es la que Dios hace de sí mismo, sobre la manera cómo Él salva pecadores, cómo actúa en este mundo que Él creó, cuáles son sus planos y sus propósitos. Esta revelación la podemos encontrar única y exclusivamente en las Sagradas Escrituras.
Debemos tener un cierto cuidado cuando mencionamos la palabra "inspiración" sé que muchas veces utilizamos este verbo para referirnos a algo que hacemos cuando estamos motivados. Cuando hablamos de inspiración de la revelación especial de las Escrituras Sagradas, no nos referimos a que las mismas fueron inspiradas de manera mecánica, no sucedió, por ejemplo, que un día el escritor estaba en su casa, en su cabaña o en su caverna y fue obligado por Dios a escribir. O que Dios bajó de repente y le agarró la mano obligándolo a escribir, esto sería una revelación mecánica, es decir, una revelación directa. Nosotros no creemos en esto. En cambio, creemos que Dios orientó y guió a los autores bíblicos, cada uno individual dentro de su propia personalidad y conocimiento ya sea intelectual o lengua que fue escrito. Y de tal forma Dios supervisó los escritos de estos autores, que el resultado es la Revelación Especial de Dios, es decir, su Palabra.
En otras palabras podemos decir que es una revelación orgánica. La misma es también plenaria, esa supervisión del Espíritu Santo se extendió incluso a cada palabra que fue escrita en la Biblia, pues Dios escogió meticulosamente cada una de ellas.
La palabra canon pasó a usarse, para referirse al número de libros que constituyen la Revelación Especial de Dios, porque muchos fueron escritos en nombre de Dios, pero el canon ayudaría a saber cuál en verdad serían los que fueron inspirados por Dios y serían la regla de fe y de práctica de su pueblo.
El conjunto de libros que constituyen la revelación especial de Dios son 66, 39 del Antiguo Testamento y 27 del Nuevo Testamento, solamente la Biblia compuesta de ese canon de 66 libros es la que reconocemos como la Palabra de Dios inspirada. No reconocemos la inspiración Divina en ningún otro escrito, pues como he mencionado anteriormente, usar el término "inspiración" para algo que hacemos es erróneo. Pues lo que implica inspiración: inherencia, veracidad, infalibilidad, autoridad, eternidad, solamente lo encontramos en los 66 libros de la Biblia.
Los judíos reaccionan diferente a nosotros al Antiguo Testamento, siendo para ellos no Antiguo Testamento, sino Torá. La cual está compuesta por los cinco libros escritos por Moisés (pentateucos; Génesis, Éxodo, Levítico, Números, Deuteronomio). Estos libros fueron reconocidos como inspirados por Dios, por ende pasan a ser canónicos, a ciencia cierta, no sabemos explicar todo este proceso del Antiguo Testamento, esto es un misterio de la Antigüedad.
En general, podemos decir que los cinco libros de Moisés o la ley, forman la base, el alicerse del canon. Luego, Dios levantó a otros profetas que basados en los escritos de Moisés explicaron y desenvolvieron la revelación de Dios a su época y proyectando al futuro la esperanza mesiánica.
En la época de Jesús y sus apóstoles, se conocía un canon hermético del Antiguo Testamento, la sociedad ya tenía noción de los libros que fueron dados por inspiración divina. Por este motivo, es que encontramos tantas referencias del Antiguo Testamento en el Nuevo, por los judíos que lo escribieron. Con excepción de Marcos y Lucas.
Estos autores judíos se refieren al Antiguo Testamento como ley, escrituras, profetas, palabra de Dios, y citan casi todos los libros del canon hebraico.
El proceso de organización de estos libros, puede haber acontecido durante el cautiverio babilónico, donde las personas estaban privadas del culto en el templo, lo que era lo principal de la religión. Surgiendo así las sinagogas con su enfoque en el estudio de la rey de Dios. En este periodo surgen algunos escribas (persona que tiene por oficio copiar a mano escritos ajenos) como Esdras que se encarga de o
}rganizar la lectura de la ley y organizan el canon.
Estos escritos fueron usados por muchos: fariseos, escribas, saduceos, maestros de la ley de Israel para conducir el pueblo, y de alguna manera adulteraron esta ley, modificando en ella sus propias interpretaciones y creaciones de propia índole. Asimismo, ya poseían una idea de los 39 libros que componían el Antiguo Testamento.
20 años después de la destrucción de Jerusalén se organizó oficialmente un concilio, donde los judíos concretaron definitivamente el canon por cuenta del surgimiento de los apócrifos del Antiguo Testamento.
La organización del Nuevo Testamento es:
4 evangelios. (Mateo, Marcos, Lucas, Juan).
1 libro histórico escrito por Lucas (Hechos).
13 cartas paulinas.
8 cartas generales escritas por los apóstoles.
1 libro de naturaleza apocalíptica, escrito por Juan.
Lo que llevó a los cristianos colocar estos libros al lado del canon (AT) para formar el Nuevo, fue el convencimiento del nacimiento, muerte y resurrección de Cristo. Estos acontecimientos eran el cumplimiento de lo que mencionaba La Ley. Por eso era necesario registrar el cumplimiento de estas promesas. También había un reconocimiento del espíritu profético en los apóstoles (Isaías, Jeremías, Ezequiel, entre otros) los cuales eran autorizados por Dios para interpretar las Escrituras de Israel, y siendo Jesucristo el centro, el cumplimiento de todo aquello que estaba escrito. Estaban convencidos de que Cristo era el Hijo de Dios y el Mesías, el cual les había prometido el Consolador, por eso cuando escribieron sobre la vida, muerte, resurrección, enseñanzas e implicaciones de la obra de Cristo, estaban siendo guiados por el mismo Espíritu que había inspirado a Moisés y a los profetas en el AT.
En la época, muchos cristianos escribieron muchos libros acerca de Jesús, su nacimiento, sobre su infancia, sus enseñanzas, sobre los apóstoles, sobre la vida de María, sobre la iglesia, sobre diversos temas muy importantes, pero la pregunta era ¿Cómo discernir realmente aquellos libros inspirados por Dios? Para ello, se adoptaron 3 criterios para poder responder esta pregunta:
Autoría apostólica: para ser considerado como canónico y ser colocado al lado de la Escritura, el libro debería ser escrito por uno de los 12 apóstoles de Cristo o Paulo, o por alguien asociado a éstos. Por ejemplo: Santiago o Judas (hermanos de Jesús), los cuales no eran apóstoles pero eran hombres apostólicos, ya que caminaban junto a los 12 apóstoles. De la misma forma, podemos considerar a Lucas, el cual no era apóstol, era gentil (no era judío) fue compañero de Paulo y Pedro. Marcos, no era apóstol pero caminó al lado de Paulo y Pedro al igual que Lucas.
Ortodoxia: La regla de fe, el escrito debía estar de acuerdo con las enseñanzas de los apóstoles, no podía ser herético, ni traer una doctrina e interpretación diferente a la de Jesús.
Aceptación general de las iglesias: Las iglesias deberían reconocer el escrito. Esto no parecía tener complicaciones, pues el Escrito ya autenticaba en el corazón de las personas y de quien enseñaba que estaban delante de la Palabra de Dios, un testimonio íntimo del Espíritu Santo.
Es necesario mencionar, que algunos acontecimientos precipitaron lo que sería la definición de canon, ya que algunos herejes se levantaron e intentaron imponer su propio canon. También el surgimiento del gnosticismo (docrtina herética que prometía a sus seguidores conseguir un conocimiento intuitivo, misterioso y secreto de las cosas divinas que los cunduciría a la salvación).
- LA IGLESIA Y EL CANON, ¿CUÁL VINO PRIMERO?
s
-El canon ya existía mismo antes de su reconocimiento como tal, ya que la autoridad de los libros inspirados es autoevidente. Lo que la iglesia hizo fue reconocer su autoridad y expulsar cualquier enseñanza herética que se presentaba y amenazaba al canon, siendo la iglesia únicamente el portavoz de estos Escritos Sagrados. La iglesia se basa en el canon y no el canon en la iglesia.
Existen muchos libros apócrifos (escondido, oculto) los cuales no fueron aceptados para ser parte del canon, ya sea por su autoría desconocida, por su contenido discordante con las enseñanzas de Jesús (gnosticismo) y la falta de aceptación universal de las iglesias, no eran leídos en la liturgia, es decir, en el culto público o en conjunto. Además de no poseer la autenticidad de la inspiración del Espíritu Santo en su contenido, por lo que no se consideraron para formar parte del canon.
En el año 1546 la Iglesia Católica se reunió en un concilio (Concilio de Trento) para tomar medidas que frenaran el avance de la Reforma Protestante en Europa. En vez de reformarse, la Iglesia Católica reafirmó sus doctrinas (purgatorio, indulgencias, mediaciónn de los santos, etc) redefinieron el canon, no siendo los 66 libros que conformaban el canon hebreo (y que tenemos hasta la actualidad) ya que introdujeron apócrifos del AT (Tobias, Judit, 1ro Macabeos y 2do Macabeos, Sabiduría, Eclesiástico y Baruc.) conformanddo así un canon con 73 libros.
Es importante mencionar en manera general las fuentes de autoridad de revelación especial que existen en las diversas corrientes religiosas.
Existen otras fuentes, otras religiones que tiene sus libros sagrados, en rasgos generales éstos son:
Islamismo: El Corán, recibido por Mohamed del ángel Gabriel.
Judaísmo: Talmud, contiene interpretaciones de rabinos.
Testigos de Jehová: escritos de Charles Taze Russell.
Mormonismo: El Libro del Mormón, recibido por Joseph Smith, por el ángel Moroni.
Adventismo: escritos de Ellen White.
Catolicismo Romano: tradición de la iglesia que se desenvuelve de manera continua. Ascensión de María en 1950 (dogma)
Nosotros los protestantes reconocemos únicamente una revelación especial, la misma podemos encontrarla exclusivamente en los 66 libros que conforman la Biblia. Tenemos solamente un canon histórico cristiano. No reconocemos otra autoridad de Revelación Especial que no sea la Biblia.
Tenemos algunas confesiones y escritos que usamos para evangelizar, pero ninguno de estos escritos, credos y confesiones son para nosotros inspirados ni infalibles y no poseen la autoridad que tienen las Escrituras. Su finalidad es la evangelización, enseñanza y aclaración de cuestiones bíblicas. Sola Scriptura.